El resucitamuertos
El resucitamuertos, un mejunje capaz de hacer recuperar la consciencia al Doctor Emmett Brown, “Doc”, en la tercera entrega de la saga fílmica en la que Michael J. Fox se movía a su antojo por la línea temporal de la Historia. Consciencia perdida por la ingesta de un trago de whisky en un saloon del viejo Oeste americano. Mejunje de receta inconfesable, ingredientes desconocidos y resultados milagrosos. Tan sólo alcanzamos a conocer su apariencia cromática: un intenso color butano. Todo esto aconteció para la imaginación de Robert Zemeckis a finales del Siglo XIX. Pues bien, aumentando en 2 esa cifra secular, nos encontramos a principios del Siglo XXI un nuevo resucitamuertos. Resucitamuertos de igual capacidad resucitadora, pero de receta e ingrediente principal conocido, así como de notable diferencia cromática. De aquel color anaranjado pasamos al blanco maculado de carmesí. La receta es un partido de fútbol y el único ingrediente necesario es la participación del SevillaFC . La simple combinación de estas dos premisas hace posible la reacción inminente del afectado y su resucitación inmediata. Llegó el club hispalense a la caldera colchonera en un impasse de insospechado clima de desconfianza y descrédito hacia el ex-sevillista artífice de la conquista liguera del campeonato español el pasado curso futbolístico por parte del equipo de la ribera del Manzanares. El buen saber hacer del técnico argentino parecía tornarse en preocupación por una dudosa renovación obligada de la plantilla. Toda esta situación de shock atletista fue solucionada de un plumazo con una dosis del resucitamuertos de nuestro siglo. Bastó un partido de fútbol contra el SevillaFC para que el Atleti volviera a ser el del Cholo, se levantara de la lona y anduviera. Resultado: 4-0 y equipo resucitado.
Semanas más tarde, el club sevillano se presentó a orillas del Nervión, esta vez sí el río y no el barrio, con el horizonte del liderazgo del fútbol nacional. Pero la receta del resucitamuertos volvió a surtir su efecto. La presencia del equipo blanco provocó ipso facto la recuperación repentina y fulgurante de los leones. El vicedecano del balompié hispano andaba coqueteando con los lugares que relegan de categoría a aquellos que por allí se instalan, pero aparecer el SevillaFC sobre el verde bilbaíno en su versión resucitadora de contrarios y renacer los del Txingurri fue todo uno: Victoria del Athletic y el Sevilla fuera de la Champions.
La pulga de Rosario entra en crisis, prácticamente noqueada desde que se habló de su posible conversión en máximo goleador histórico de la Liga en el Cepsa Bernabéu o “como quieran ellos que se llame”. Se duda hasta de su continuidad como blaugrana. No marca y no consigue batir a Zarra ni según las cuentas de unos ni de otros. Tras el parón de la competición local marcado por FIFA, el heredero del mejunje que despertó a Doc está dispuesto a ser probado de nuevo. El equipo de la capital de Andalucía está presto a demostrar su capacidad resucitadora de todo aquel rival en horas bajas que se ponga por delante. Encuentro de altas miras en los límites de Hospitalet y el argentino recreador de la “mano de Dios” obra el milagro, resucita con un triplete goleador que le encumbra al zenit de los artilleros de la Liga Española, cuente los goles quien los cuente. Resultado: FCB 5 – SFC 1, y Zarra ya por detrás de Messi.
Por cierto, de paso, un sorbito de resucitamuertos para el rubio croata estandarte nervionense hasta junio y ahora timón azulgrana. Que andaba un poco bajo de moral. Buen gol de Rakitic.
Así pues, propongo que el club al que prestó su nombre la ciudad de Sevilla vista de naranja butano los días que muestre su versión de esencia resucitadora, como homenaje al citado pasaje del extraordinario film producido por Steven Spielberg.
O si no, la pelota es mía y me la llevo.
